¡Niños, niñas y adolescentes, población indispensable a proteger!
¡Niños, niñas y adolescentes, población indispensable a proteger!
¿Qué es una niña o niño?
Es un ser humano pequeño que tiene derecho a ser feliz y ser una persona querida para los demás.
La defensa de la persona humana y el respeto de su dignidad es el fin supremo de la sociedad y del Estado. Así lo consagra el primer artículo de la Constitución del Estado y acorde a lo dicho se diseñan todas las políticas públicas del país.
El próximo 2021 se cumplirán 200 años de vida republicana, por lo tanto es muy importante que nos encuentre en la senda del desarrollo humano sostenible, construyendo una nación con sólidas bases sociales y económicas donde los derechos de todas las personas se respeten y donde las brechas e inequidades, cuya persistencia hoy nos interpela, desaparezcan o queden reducidas a su mínima expresión.
Por ello, el país debe mantener una política de Estado consistente, continua y eficaz en la protección de los derechos de los niños, niñas y adolescentes, sobre todo en lo que respecta a su salud, educación y calidad de vida al interior de sus familias y comunidad.
Fundamental deviene pues que en la agenda del Estado se defiendan los derechos de los niños, niñas y adolescentes. Se sabe que en los últimos años se vienen registrando tasas de crecimiento económico que fundamentan la esperanza de poner fin a situaciones de exclusión y desigualdad que vienen de décadas pasadas, lo cual garantiza la adecuada nutrición, documentación universal, inicio de vida segura, salud integral y acceso a una educación de calidad, intercultural e inclusiva.
Subrayando la erradicación de las violaciones de sus derechos, violencia contra los niños, niñas y adolescentes y la explotación de los mismos. Priorizando la acción por la infancia y la adolescencia que dará a nuestro país los fundamentos sólidos para llegar al Bicentenario como una nación enrumbada hacia el progreso y desarrollo sostenible de todos sus habitantes, principalmente de los menores de edad.
El Estado debe tener como principios rectores en el tema de infancia y adolescencia, los fundamentos filosóficos y éticos que deben de regir la política pública a favor de la infancia y adolescencia. Lo cual constituye la piedra angular cuyos sustentos son valores universales.
De acuerdo con los instrumentos internacionales y la legislación peruana, la familia es el núcleo fundamental de la sociedad y debería ser el espacio más adecuado para el crecimiento y bienestar de los niños, niñas y adolescentes, por ser el ámbito de primera socialización.
En nuestro país la infancia y adolescencia plantean, un desarrollo ético de primer orden. Nos exige dar pasos concretos que más allá de todos los discursos, nos obligan a profundas transformaciones culturales.
Perú requiere de una visión poderosa a favor de la infancia y adolescencia que asuma la sociedad y se afinque en las estructuras mentales, políticas y culturales. De tal manera que los principios y derechos a favor de los niños, niñas y adolescentes formen parte de la vida cotidiana de todos los peruanos.
Psicoterapeuta
Teléfonos: 995 006 364, 944 433 166, (01) 303 1413
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¿Qué es una niña o niño?
Es un ser humano pequeño que tiene derecho a ser feliz y ser una persona querida para los demás.
La defensa de la persona humana y el respeto de su dignidad es el fin supremo de la sociedad y del Estado. Así lo consagra el primer artículo de la Constitución del Estado y acorde a lo dicho se diseñan todas las políticas públicas del país.
El próximo 2021 se cumplirán 200 años de vida republicana, por lo tanto es muy importante que nos encuentre en la senda del desarrollo humano sostenible, construyendo una nación con sólidas bases sociales y económicas donde los derechos de todas las personas se respeten y donde las brechas e inequidades, cuya persistencia hoy nos interpela, desaparezcan o queden reducidas a su mínima expresión.
Por ello, el país debe mantener una política de Estado consistente, continua y eficaz en la protección de los derechos de los niños, niñas y adolescentes, sobre todo en lo que respecta a su salud, educación y calidad de vida al interior de sus familias y comunidad.
Fundamental deviene pues que en la agenda del Estado se defiendan los derechos de los niños, niñas y adolescentes. Se sabe que en los últimos años se vienen registrando tasas de crecimiento económico que fundamentan la esperanza de poner fin a situaciones de exclusión y desigualdad que vienen de décadas pasadas, lo cual garantiza la adecuada nutrición, documentación universal, inicio de vida segura, salud integral y acceso a una educación de calidad, intercultural e inclusiva.
Subrayando la erradicación de las violaciones de sus derechos, violencia contra los niños, niñas y adolescentes y la explotación de los mismos. Priorizando la acción por la infancia y la adolescencia que dará a nuestro país los fundamentos sólidos para llegar al Bicentenario como una nación enrumbada hacia el progreso y desarrollo sostenible de todos sus habitantes, principalmente de los menores de edad.
El Estado debe tener como principios rectores en el tema de infancia y adolescencia, los fundamentos filosóficos y éticos que deben de regir la política pública a favor de la infancia y adolescencia. Lo cual constituye la piedra angular cuyos sustentos son valores universales.
De acuerdo con los instrumentos internacionales y la legislación peruana, la familia es el núcleo fundamental de la sociedad y debería ser el espacio más adecuado para el crecimiento y bienestar de los niños, niñas y adolescentes, por ser el ámbito de primera socialización.
En nuestro país la infancia y adolescencia plantean, un desarrollo ético de primer orden. Nos exige dar pasos concretos que más allá de todos los discursos, nos obligan a profundas transformaciones culturales.
Perú requiere de una visión poderosa a favor de la infancia y adolescencia que asuma la sociedad y se afinque en las estructuras mentales, políticas y culturales. De tal manera que los principios y derechos a favor de los niños, niñas y adolescentes formen parte de la vida cotidiana de todos los peruanos.
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